(En respuesta a Olga Digón,
poeta en un foro de poesía)
Gracias Olga, hermana del alba
por tus versos benditos
que clavan profundo en el alma
el sinsentir de los míos.
Vista la verdad que clamas
siento un cosquilleo dentro,
es ese Dios que me llama
y me da su mano de nuevo.
Ya estoy leyendo la biblia,
ya balbuceo sus rezos
mi corazón sin malicia
vuelve, al redil, más borrego.
¿No me notas la alegría
de palpar a un Dios bueno?
hasta quizás algún día
me nombren San Judas Ateo.
(cruzando los dedos)
Por
A. Ángel Judas S.
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